Seguro que conoces a personas que no aparentan la edad que tienen o que, por el contrario, han envejecido de una forma muy acentuada.
Eso es debido a que los procesos que se llevan a cabo en nuestro cuerpo, tanto los que lo afectan a nivel físico como los que lo afectan a nivel psico-emocional tienen un impacto en el envejecimiento. Así pues, podríamos tener una edad biológica diferente a la cronológica.
Pongamos el ejemplo de una persona que ha sufrido un nivel de estrés muy alto y mantenido en el tiempo debido a un problema emocional. El impacto biológico de este estrés hará que algunos parámetros que se consideran fisiológicos se salgan de los rangos adecuados para la edad de esta persona y que exista un desequilibrio entre los procesos de regeneración y degeneración celular con un balance hacia estos últimos. Las hormonas de estrés mantenidas en el tiempo (cortisol, adrenalina y noradrenalina) harán que se produzca un grado de inflamación crónica debido a una respuesta inmune desmesurada.
Una inmunidad sobre estimulada hará que se produzca daño celular que será difícil de reparar en un contexto de inflamación sin resolver que se irá perpetuando en el tiempo con un inevitable envejecimiento prematuro de nuestros tejidos. Así pues, podemos distinguir entre:
- Edad biológica: edad que está relacionada con el estado funcional del cuerpo.
- Edad cronológica: edad que viene marcada por la fecha de nacimiento.
Entonces, tener una mejor edad biológica ¿nos podría permitir vivir más años? Pues en cierto modo sí, y lo mejor es que, además, lo haríamos con mejor calidad de vida, que al final es lo que nos interesa, es decir, dándole vitalidad a nuestros años.
Potenciando los factores que alargan nuestra vida biológica estamos previniendo la aparición de enfermedades degenerativas trabajando a un nivel mucho más profundo de salud, el celular.
Aunque la genética personal es un factor a tener en cuenta, hay otros factores que pueden llegar a tener aún mucho más peso en todos los procesos que llevan al envejecimiento prematuro acortando la edad biológica.
Son los factores relacionados con la epigenética, es decir, los que están por encima de la propia genética, los relacionados con el estilo de vida y el ambiente que nos rodea.
La base de una edad biológica idónea está en acentuar la capacidad de regeneración celular, introduciendo pequeños pero poderosos cambios en nuestra vida.
La base de una edad biológica idónea está en acentuar la capacidad de regeneración celular, introduciendo pequeños pero poderosos cambios en nuestra vida.
Romper el sedentarismo y aceptar que la actividad física forma parte de nuestra condición humana, prestar atención a nuestra propia cronobiología respetar las horas de vigilia y sueño, nutrirnos con alimentos naturales y dejando de lado la basura comestible que daña la microbiota, mantener nuestra mente activa, cuidar de nuestros sistemas de detoxificación, o tomar decisiones que mejoren nuestra salud mental, son cambios sencillos que nos van a permitir mejorar nuestra edad biológica.
Desequilibrios metabólicos, inmunes, endocrinos y bioquímicos manifestados mediante procesos patológicos como la resistencia a la insulina, la inflamación silenciosa, la autoinmunidad o las neurodistonías son los que poco a poco nos hacen envejecer de una forma prematura.
Empieza a mejorar tu edad biológica y darle vida a tus años. Sólo tienes que escoger por dónde empezar y dar un paso adelante en pro de tu salud.
Si necesitas ayuda para mejorar aspectos de tu salud no dudes en contactar conmigo.
Bibliografía: Han JDJ, Xia X, Chen W, McDermott J. Molecular and phenotypic biomarkers of aging. Vol. 6, F1000Research. Faculty of 1000 Ltd; 2017.
4 respuestas
Es así..muy bueno
¡Gracias!
Se debiera agregar una tercera edad, que podríamos llamar: Edad sicológica/emocional.
Totalmente de acuerdo Marcelo